Asistencia a congresos y networking: lo que necesitas saber.
¿Alguna vez has asistido a un congreso y, al terminar, te diste cuenta de que apenas hablaste con dos o tres personas, y que las oportunidades que podías haber creado se escaparon? No eres el único. La mayoría de los asistentes se concentran tanto en las ponencias que olvidan lo más valioso de estos eventos: las conexiones humanas. Y aquí está el detalle que puede cambiar tu próximo congreso: tres tips de networking sencillos, prácticos y aplicables, que te ayudarán a salir con contactos reales, nuevas ideas y posibles aliados para el futuro.
En este artículo no encontrarás frases vacías ni consejos obvios. Te mostraré cómo prepararte antes, cómo actuar durante el evento y cómo mantener vivas esas relaciones después. Y te prometo algo: si los aplicas, tu próxima experiencia en un congreso será completamente distinta.
Por qué los congresos son un terreno fértil para el networking
Antes de entrar de lleno en los tips, hay que entender algo básico: los congresos no son solo para escuchar charlas, son un escenario diseñado para encontrarte con personas que tienen intereses similares a los tuyos.
- Todos los que asisten ya comparten un tema en común: la temática del congreso.
- La mayoría está abierta a conversar y conocer gente.
- Muchos asistentes buscan lo mismo que tú: aprender, inspirarse y ampliar su red.
Esto significa que las barreras iniciales son más bajas que en otras situaciones. No tienes que justificar por qué te acercas a alguien, basta con un: “¿Qué te ha parecido la última ponencia?” y la conversación empieza sola.
Tip 1: Prepárate antes de llegar
El networking no empieza cuando entras al recinto. Empieza días antes. Prepararte te permitirá aprovechar mejor el tiempo y destacar entre la multitud.
Investiga a los asistentes y ponentes
Hoy en día, casi todos los congresos publican la lista de ponentes, patrocinadores o incluso asistentes en redes sociales. Dedica un rato a revisar:
- ¿Quiénes son las personas clave?
- ¿A quién te gustaría saludar sí o sí?
- ¿Qué puntos en común tienes con ellas?
Tener este mapa previo evita que te quedes “a ver qué pasa” y hace que tu acercamiento sea más natural.
Define tu objetivo
Pregúntate: ¿qué quiero conseguir?
- ¿Inspiración?
- ¿Colaboraciones?
- ¿Posibles clientes o proveedores?
Si no tienes un objetivo claro, lo más probable es que termines con un montón de tarjetas de visita que luego no significan nada.
Prepara tu presentación personal
No hablo de ensayar un discurso largo, sino de tener listo un elevator pitch de 20 segundos: quién eres, qué haces y qué buscas. Por ejemplo:
“Soy Marta, trabajo en marketing digital para pymes, y me interesa conocer empresas que estén empezando a trabajar su presencia online”.
Con esto das claridad y abres la puerta a que el otro te diga: “Pues justo conozco a alguien que…”.
Tip 2: Durante el congreso, conversa con intención
Aquí es donde la mayoría falla: llegan, se sientan, escuchan, y se van. Si quieres que el congreso sea más que un par de charlas interesantes, necesitas participar activamente.
Rompe el hielo de forma sencilla
No tienes que inventar nada complicado. Tres frases funcionan en casi cualquier situación:
1. “¿Qué te ha parecido la ponencia?”
2. “¿Es tu primera vez en este congreso?”
3. “¿A qué te dedicas dentro de este sector?”
No hables solo de trabajo
El networking no es solo intercambio profesional. Hablar de algo personal (un hobby, de dónde vienes, qué te llamó la atención del evento) hace que seas más recordado.
Calidad sobre cantidad
No se trata de hablar con 50 personas en un día. Es mejor 3 o 4 conversaciones profundas que te permitan recordar quién es la otra persona y que ellos también te recuerden a ti.
Usa las pausas estratégicamente
Los mejores momentos para conectar no son las conferencias, sino los cafés, almuerzos y descansos. Ahí es donde las personas están más relajadas y abiertas.
Tip 3: Después del congreso, cultiva la relación
Aquí está la parte que casi todos olvidan: darle continuidad. Conectar en un congreso es el inicio, no el final.
Contacta rápido
En las primeras 48 horas, envía un mensaje o correo breve:
“Hola, fue un gusto coincidir en el congreso de X. Me quedé pensando en lo que comentaste sobre Y, y me encantaría seguir en contacto”.
Aporta valor
No escribas solo cuando necesites algo. Comparte un artículo que le pueda interesar, felicítalo por un logro que viste en LinkedIn o haz una introducción con alguien que pueda ayudarle.
Haz seguimiento periódico
No tienes que estar hablando cada semana, pero sí conviene tener un sistema: cada 2-3 meses, revisa tu lista de contactos y piensa: “¿Con quién no he hablado en un tiempo?”.
Un simple “¿Cómo vas con aquel proyecto que mencionaste?” puede reactivar la relación de forma natural.
Errores comunes en el networking en congresos
- Ser demasiado vendedor: nadie quiere escuchar un discurso de ventas en medio de un café.
- No escuchar: si hablas más de lo que escuchas, no aprenderás nada nuevo.
- Acumular tarjetas sin sentido: no es coleccionar contactos, es construir relaciones.
- Dejar pasar demasiado tiempo antes de dar seguimiento: la memoria se enfría rápido.
Un ejemplo práctico
Imagina que asistes a un congreso de innovación.
- Antes: investigas a tres ponentes que te interesan y preparas una breve presentación sobre ti.
- Durante: en una pausa, preguntas a otra asistente qué le pareció la charla sobre IA. Ella resulta estar buscando proveedores de servicios digitales. Hablan 10 minutos, se caen bien y acuerdan intercambiar contactos.
- Después: al día siguiente le envías un mensaje agradeciendo la conversación y compartes un artículo que puede ayudarle. Dos meses después, ella te invita a colaborar en un proyecto.
Conclusión: tus próximos congresos no serán iguales
Los congresos son como una mina de oro: puedes salir con las manos vacías o con auténticos tesoros. Todo depende de cómo te prepares, cómo actúes durante el evento y qué hagas después.
Si aplicas estos tres tips de networking —prepararte antes, conversar con intención durante, y cultivar las relaciones después— no solo ampliarás tu red, también crearás oportunidades reales para tu futuro.
Y aquí te dejo la pregunta abierta: en tu próximo congreso, ¿vas a limitarte a escuchar, o vas a salir con nuevas conexiones que podrían cambiar tu camino?



